Giorgio, Teletroll e impuestos




A Giorgio Jackson la teletón le da vergüenza, a mi me enorgullece. Es por eso que, para empezar, jamás escribiría una columna criticándola en los días que ésta se efectúa. Giorgio, Camila y todos los demás tuvieron 363 días para criticarla, me parece más que desatinado su actuar, es casi mala leche.

Uno entiende que ellos demonizan todo lo que es empresa y quizás los asustaban con empresario y no con el cuco cuando eran chicos, pero las criticas, no sólo son hechas en momentos indebidos, además instalan mantos de dudas con afirmaciones falsas sobre tributación que comienzan a viralizarse entre todos los “expertos” en Chile y de un momento a otro tuvimos, en plena teletón, hordas de tolls expertos en derecho tributario, haciéndome creer que los únicos que no lo logran entender son los alumnos de derecho que necesitan ramos especiales porque somos tan incapaces y retrasados que debemos aprender con ramos que duran hasta dos años y medios, según la universidad.

Pero, ¿acaso una empresa dona fondos a la teletón está eludiendo, evadiendo o robando dinero a través de alguna ley maldita hecha para que estos empresario chupa sangres sigan enriqueciéndose?

Veamos un caso práctico:

Supongamos que una empresa tiene al término del ejercicio una utilidad tributaria de $1000 y decide donar 1% de ésta al teletón, vale decir, $10. Para el ejercicio utilizaremos la tasa del impuesto de primera categoría aplicable al período 2012, o sea, 20%.

Si la empresa no hace la donación debe pagar un impuesto de $200, lo que da como resultado que a la empresa le queda disponible $800. ¿Fácil cierto? ¿Ya nos creemos tributaristas?

Si la empresa donara y no existiera ningún beneficio tributario para hacerlo deberá pagar los $200 por el impuesto de primera categoría, luego donaría los $10 y se le aplicaría un impuesto de 35% por tratarse de un gasto prohibido desde el punto de vista tributario si la empresa fuera una Sociedad Anónima, en rigor es una multa. Entonces en total pagaría un impuesto de $203,5 y le quedaría disponible para la empresa $786,5

Y llegamos a lo que esperaba, leer la trampa tributaria, la maquinación de ese empresario con terno y ojos rojos…bueno, espero no se decepcione.

Cuando la empresa dona, se acoge al beneficio tributario del art 46 del Decreto Ley 3063, dona los $10 y los deduce como gasto, baja su tasa imponible y deberá pagar de impuesto $198, quedando disponible para la empresa $792. ¿Pero que fue lo que pasó?

La empresa pagó menos impuesto porque disminuyó la base imponible, pero no significó ningún ahorro ya que antes disponía de $800 después de pagar impuestos y ahora, luego de la donación con beneficio tributario dispone de $792, ¿pagó menos impuestos? No, porque pagó lo mismo pero sobre una base distinta, ¿entonces ganó con la donación? Difícil si antes de la donación hubiera tenido $800 y después $792.

Ud. podría argumentar que ganan mucho más porque al estar relacionados a la fundación teletón y llenar de publicidad el país con la marca la gente compra más aquella marca, y blah blah blah, pero antes términos el ejercicio.

Hay $2 pesos perdidos en este cuento, ¿Acaso lo financio el Estado? El Fisco no dio ese dinero, sino que dejó de percibirlos del impuesto de primera categoría. Teóricamente dejó de ganar ese dinero porque disminuyó la base imponible, y es lógico porque ¿cómo incentivarías a alguna empresa a que done? No porque se tengan grandes ganancias tienen como una deuda con la sociedad, las empresas, negocios, almacenes, etc, buscan obtener ganancias con sus actividades y eso no tiene nada de sucio ni malo, quién vea a un empresario como un chupa sangre es que nada de historia sabe. El computador en que lees, la ampolleta que te ilumina, el lápiz con el que escribes y casi la totalidad de los objetos que utilizas a diario fueron inventados por emprendedores que los motivaban dos sentimientos, la curiosidad y el deseo de obtener un beneficio por su labor.




¿Acaso el Estado debiera financiar la teletón? Me parece ridículo, la teletón no es sólo recaudar dinero, ésta sólo buscó este año recolectar US$37 millones y el presupuesto de salud de Chile para el año 2011 superaba los US$8mil millones. La plata existe, pero no es un tema de lucas.

Se trata de una obra que nos une como chilenos, que le da visibilidad a la discapacidad, y en consecuencia tolerancia y aceptación; se trata de la participación, como sociedad , de una obra maravillosa que nos da parte de nuestra identidad y tradición de las últimas décadas.

La teletón es un grupo intermedio, y es a través de ellos que las sociedades desarrollan sus intereses y buscan alcanzar sus objetivos particulares de la forma más eficiente posible. Si el Estado hubiera creado la teletón tendría que haber sido creando algún nuevo organismo (Servicio Nacional de Discapacidad fue creado recién el año 2010 por la ley 20.422) y para ello debe crear normas para enmarcar el actuar de ese organismo, con esto llega la burocracia y ya la atención se transforma en un centro con funcionarios públicos desmotivados y llenos de trabas producto de las normas que los rigen, colmados de personas que saben que no los pueden echar y trabajan a la vuelta de la rueda.

Las fundaciones pueden actuar libremente dentro del objetivo que se han planteado, su único limitante es el dinero (el mismo que limita el actuar en caso que fuera pública ya que para todo requeriríamos chorrocientas firmas para soltar dineros y esperar plazos y tiempos y tonteras burocráticas). Por eso la teletón es una tremenda fundación, porque es financiada casi en su totalidad con los aportes voluntarios de los chilenos y porque, gracias a su condición de fundación, logra niveles de calidad y eficiencia con un presupuesto mínimo si lo comparamos con el presupuesto total de salud.


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